QUEREMOS UNA ANTORCHA ABIERTA

QUEREMOS UNA ANTORCHA ABIERTA, NO ELITISTA, EN LA QUE TODOS LOS MIEMBROS DEL TALLER PUEDAN PUBLICAR SUS OBRAS SIN RESTRICCIONES. SOBRE TODO A LOS NUEVOS... ANIMO

miércoles, 29 de febrero de 2012

POUR HOMME



A ciertas edades los Reyes ya no son lo que eran. Últimamente he cogido la costumbre de escogerme los Reyes yo mismo. Este año vagaba por la planta baja de The English Cut dejándome seducir por toda clase de libros, discos y demás tarecos culturales. Finalmente me decidí por una caja con la discografía en los años 50 del gran Miles Davis.
Anticipando mentalmente en mi cerebro las notas, a veces tan elegantes, a veces tan salvajes, del genial Miles,  continúe mi peregrinar por entre las estanterías. Tenia la intención de regalarme también un perfume de esos cuyo precio es tan doloroso (Al menos para mi) que solo me atrevo a pagarlo en ocasiones tan señaladas.
En la sección de Perfumería, donde las dependientas son especialmente ñoñas, con un frasco en la mano, se me ocurrió preguntarle a una: “¿Es de hombre?”
Con una especie de  tonillo “didáctico” me contesto muy relamida: “¿Si es de “Caballero” quiere decir? .Si señor. Se esta vendiendo muy bien y precisamente ahora tenemos una oferta que… bla, bla, bla…
La trompeta de Miles enmudeció y fue sustituida en mi cerebro por trailers de películas del viejo Hollywood: “Los Caballeros de la Tabla Redonda” “Los caballeros las prefieren rubias” “Oficial y Caballero”… O estampas de la más rancia épica: Caballero Andante, Los Caballeros Templarios, Teutónicos, etc.
Aunque sé que el término es gramaticalmente correcto, me suena algo trasnochado. Mi impresión es que ya solo lo usan los camareros horteras…
Estuve a punto de contestarle que si los diseñadores ponen “Pour Homme” o “For Man” en los frascos será por algo. Pero como quería conservar incólume mi Espíritu Navideño, me reprimí y continúe mi excursión. Tampoco me pareció el momento de hacer un análisis sobre sinónimos o entrar en preguntas tan espinosas como: “¿Son todos los hombres “Caballeros”? o ¿Son todos los  caballeros “Hombres”?
Esta ultima me hizo recordar (A cabeza non para) el poema de Rudyard Kipling “IF” (SI), en él que sienta algunas condiciones para ser HOMBRE en el sentido espiritual del termino. Ojo: Escribo con mayúsculas la palabra para señalar que quiero alejarla del majadero  machismo-feminismo de nuestros días (Vascos y Vascas, Miembros y Miembras etc.). Se refiere a la dignidad, valores e ideales que deberían presidir la conducta de los integrantes de la especie humana cualquiera que sea su sexo.
Ahí van los versos de Kipling:

IF
Si en tu puesto mantienes la cabeza tranquila
cuando a tu lado todo es cabeza perdida.
Si tienes una fe en ti mismo que te niegan
y no desprecias nunca las dudas que ellos tengan.
Si esperas en tu puesto sin fatiga en la espera.
Si engañado, no engañas,
y no buscas mas odio que el odio que te tengan
Si eres bueno y no finges ser mejor de lo que eres
Si al hablar no exageras lo que sabes y quieres

Si sueñas y los sueños no te hacen su esclavo.
Si piensas y rechazas lo que piensas en vano.
Si tropiezas el triunfo; si llega la derrota
y a los dos impostores los tratas de igual modo.
Si logras que se sepa la verdad que has hablado
a pesar del sofisma del orbe encanallado.
Si vuelves al comienzo de la obra perdida,
aunque esta obra sea la de toda tu vida.


Si arriesgas en un golpe, y lleno de alegría,
tus ganancias de siempre a la suerte de un día;
y pierdes, y te lanzas de nuevo a la pelea,
sin decir nada a nadie de lo que es y lo que era.
Si logras que tus nervios y el corazón te asistan,
aun después de la fuga de tu cuerpo en fatiga,
y se agarren contigo, cuando no quede nada;
porque tu lo deseas, lo quieres y mandas.


Si hablas con el pueblo y guardas tu virtud.
Si marchas junto a reyes con tu paso y tu luz.
Si nadie que te hiera llega a hacerte la herida.
Si todos te reclaman y ni uno te precisa.
Si llenas el minuto inolvidable y cierto
de sesenta segundos que te lleven al cielo.
Todo lo de esta tierra será de tu dominio;
y mucho mas aun: SERAS HOMBRE, hijo mío.


            RUDYARD KIPLING

Ahí queda eso. Nada más y nada menos.
                               Ovidio


No hay comentarios:

Publicar un comentario